¿ TE CONSIDERAS TRADICIONALISTA, MODERNISTA O PROGRESISTA DENTRO DE LA IGLESIA ? ¿QUIÈN ES LA FUENTE DE LA DIVICIÓN?
¿ TE CONSIDERAS MODERNISTA Y PROGRESISTA DENTRO DE LA IGLESIA ? ¿Crees en el Dios que se hizo hombre para salvarnos del pecado y que murió en la cruz y resucitó, que nos llama a participar en una vida de sacrificio y amor hasta que él venga para elevarnos de entre los muertos en el Juicio Final, donde encontraremos que algunos han elegido la vida eterna, otros la condenación eterna? En los hechos, la mayoría perece creen en lo que cita H. Richard Niebuhr que … “Un Dios sin ira llevó a los hombres sin pecado a un reino sin juicio a través de un Cristo sin cruz.” Esta es la RELIGIÓN DEL ANTICRISTO, de Cristo sin la cruz, a pesar que adopte todos los aspectos formales y ritos del catolicismo original, e incluso, aun habiendo esta mutado en los ambientes evangélicos protestantes en la llamada "DOCTRINA DE LA PROSPERIDAD"
Y PARA EVITAR QUE LO QUE HACEMOS NO TENGA CONSECUENCIAS EN EL JUICIO FINAL, TRATAMOS DE CAMBIAR EN LA TIERRA LOS CRITERIOS POR LO QUE SE NOS JUZGARÁ EN EL CIELO, TRATANDO DE MODIFICAR LOS QUE LA IGLESIA CONSIDERA PECAMINOSO O ADMISIBLE.
¿Pero esta fantasía mundana de que Dios acepta casi cualquier laxitud es fecunda a largo plazo para la institución eclesial?
¿LA MAYORÍA DE LOS CATÓLICOS CREEN EN EL DIOS CRISTIANO?
Está siendo cada vez más dudoso.
¿Creen en el Dios que se hizo hombre para salvarnos del pecado y que murió en la cruz y resucitó, que nos llama a participar en una vida de sacrificio y amor hasta que él venga para elevarnos de entre los muertos en el Juicio Final, donde encontraremos que algunos han elegido la vida eterna, otros la condenación eterna?
En los hechos, la mayoría perece creen en lo que cita H. Richard Niebuhr que …
“Un Dios sin ira llevó a los hombres sin pecado a un reino sin juicio a través de un Cristo sin cruz.”
Esta es la religión del anticristo, de Cristo sin la cruz, a pesar que adopte todos los aspectos formales y ritos del catolicismo original.
UNA HEREJÍA O NUEVA RELIGIÓN SE ABRE PASO
Hoy día pulula dentro del catolicismo una herejía muy grave.Por querer acercar tanto a Cristo a los hombres y por pedir que solucione nuestros problemas económicos y materiales, se ha despojado a Cristo de su dimensión divina y espiritual.
Para esta herejía, Jesús no vino para salvarnos del pecado, no murió en la cruz para redimirnos y abrirnos las puertas del cielo.
Para algunos, sobre todo en Latinoamérica, vino como inconformista que quiere poner orden y justicia, destruyendo a los ricos y capitalistas, para así dar de comer a los pobres.
Quienes defienden esta posición dicen “Lo urgente hoy es el estómago, la cultura, la distribución igualitaria”.
Este error distorsiona la misión de Cristo, pues Cristo vino a liberarnos del pecado que se esconde en el corazón de cada hombre. Eliminado el pecado, podrán cambiarse más fácilmente las estructuras de pecado.
COMO PODEMOS DEFINIR ESTA NUEVA RELIGIÓN
¿Donde está la base falsa de esta herejía? En que la salvación universal se ofrece a todo el mundo, independientemente de sus creencias o prácticas éticas.
Queremos evitar el dolor y ser felices, y esta interpretación de la religión nos afirma justo donde estamos y lo que queremos. Y nos ofrece el mecanismo de orar para que esto sea posible.
Belloc llamó Modernismo a esta herejía, pero incluso él reconoció que parecía ser una mezcla de todas las herejías y que era difícil de precisar o definir.
Otros creen que el mejor nombre para ella es Inconsecuencialismo, o sea la creencia de que no existen las consecuencias en ninguna de nuestras elecciones o acciones. Nada de lo que hacemos conducirá al cielo o al infierno.
Nuestras vidas son obras de ficción escritas enteramente por nosotros mismos.
Dios aplaude cualquier elección que hacemos, porque nos ama y quiere que seamos felices, como un maestro de jardín de infantes de escuela pública indulgente.
Y puesto que nada conduce a nada, la cultura de esta herejía es una especie de parodia del Reino de los Cielos: el infierno en la tierra, un lugar que es por encima de todo irreal.
TENEMOS LIBERTAD PARA ELEGIR TODO
Es un lugar donde podemos elegir nuestros propios géneros, nuestras propias doctrinas, nuestro propio camino, nuestra verdad, nuestra propia vida.
Y si por ahí no lo hacemos porque aún nos pesa la catequesis que recibimos cuando niños, no vemos mal, ni reprobable, ni siquiera cuestionable, que otros lo hagan.
Es un lugar que carece de todo juicio, porque el juicio es sobre las consecuencia de nuestra propia toma de decisiones del día a día, de nuestras propioas “decisiones difíciles”; pero sucede que ahora ningun asunto tiene consecuencias en lo más mínimo.
Así el infierno es un lugar donde nada se conecta con nada, todo está aislado, fragmentado y atomizado.
EL CRISTO SIN LA CRUZ
El objetivo es negar la cruz y todo lo que implica la Cruz: el sacrificio, el sufrimiento, la disciplina, la decisión, la muerte, la culpa y el pecado.
Tener a Cristo sin la cruz es su objetivo. Esto, según el Obispo Sheen, fue el sello del espíritu del anticristo: la negación de la cruz en todas sus formas.
Pero si usted, en toda la filosofía de su vida se dedicó a negar las consecuencias (y la cruz es la expresión más contundente de las consecuencias), entonces todo lo que usted haga – especialmente su religión – se convierte en inconsecuente, lo que significa decir, sin importancia, menor, sin sentido, sosa, y en última instancia una forma de pasar el tiempo y conformarnos.
¿POR QUÉ UN SER HUMANO NORMAL BUSCA ALGO COMO ESTO?
La mayoría de nosotros no estamos encantados con los cristianos que nos hablan del pecado, del infierno, de los 10 mandamientos. Y ahí está el caldo de cultivo.
Si queremos una experiencia religiosa podemos tomar un paseo por el bosque y orar en paz y tranquilidad.
Pero por supuesto, necesitamos a la Iglesia para los Sacramentos y para la enseñanza infalible de la moral y la fe, pero esto es visto como un atavismo, una costumbre formal que ha sido despojada de consecuencias.
EL CRISTO SIN IGLESIA ¿Y UNA IGLESIA SIN JERARQUÍA?
El objetivo es negar la Iglesia, la esposa de Jesucristo y contestar a su santo magisterio todo lo que implica llevar a las almas a la desobediencia, al relativismo y al desconocimiento, para que el pueblo de Dios ande como Ovejas sin Pastor.
Es el espíritu de apostata pretende tener a un Cristo sin la Iglesia Católica. Es el espíritu de Jezabel atacará siempre a todos los profetas, especialmente al Sucesor de Pedro, para promover la desobediencia a su magisterio.
La apostasía es un horrible pecado, de una persona que habiendo sido creyente en Cristo y bautizado en su única Iglesia, después de abrazar la fe en el Señor, se eche atrás y reniegue de la fe en Cristo y su santa Iglesia, sobre lo que el Señor nos alerta: "Dijo Jesús: «Nadie que pone la mano en el arado y mira hacia atrás es apto para el Reino de Dios.» (Lucas 9,62). Por eso debemos perseverar en nuestra fe católica en Cristo encarnado, crucificado y resucitado, librarnos de todo engaño, revisando todo lo que la Santa Biblia dice respecto a cada tema, para no equivocar o torcer, el sentido del Libro Sagrado, no vasta con proclamar que Cristo sea nuestro único y suficiente salvador; el Reino de los cielos es para los que hagamos con perseverancia la voluntad de Dios; “El cual, dará a cada cual según sus obras: a los que, por la perseverancia en el bien busquen gloria, honor e inmortalidad: vida eterna” (Romanos 2,7) pues las referencias Bíblicas, hay que entenderlas según su contexto, atentos y cuidadosos como lo manda la Biblia: "¡Mirad, hermanos!, que no haya en ninguno de vosotros un corazón maleado por la incredulidad que le haga apostatar de Dios vivo" (Hebreos 3,12). «No todo el que me diga: "Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial" (Mateo 7,21). “Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas”. (Lucas 21,19)
Es así como en algunas homilias dicen que cuando Cristo venga, “todo nuestro deseo será cumplido”, cuando en realidadnuestra lucha en el mundo tiene que ver con negar el propósito del deseo, educarnos en la abstención y eliminar las pasiones desordenadas.
Porque en realidad el deseo es una especie de manifestación física del sentimiento de inconsecuancialismo.
Amar a una mujer, casarse con ella, formar una familia que dure toda la vida, y tener un montón de bebés no es el punto del deseo humano normal para un inconsecuencialista.
La esterilidad es el único sacramento de la fe inconsecuente y disfrutar de las libertades sin castigo en ningún momento.
¿Y que es el cielo? Es un gran buffet de postres donde se puede comer todo lo que quieras y no engordar, no sufrir las consecuencias.
Es un lugar donde nadie juzga a nadie más, donde no hay Juicio en la naturaleza sobre la realidad, donde todos somos felices para siempre, donde nuestros deseos se cumplen fácilmente, cualquiera que sean.
EL COLAPSO INMINENTE
¿Quién querría un cielo así, o una fe así? Vara Dreher escribe sobre el colapso inminente de lo que he llamado la Iglesia de Inconsecuencialismo.
El sociólogo Philip Rieff, en El Triunfo de la Terapéutica, observó que las instituciones mueren cuando ya no pueden comunicar sus valores fundamentales a la siguiente generación de una manera convincente.
Dijo esto para apoyar su afirmación (¡de 1966!) que el cristianismo se estaba muriendo en Occidente, porque nosotros, los occidentales nos hemos vuelto hostiles al espíritu ascético que es inseparable de cristianismo auténtico y que ha sido desde el principio.
Y probablemente Rieff tenga razón, porque un cristianismo que hace la demanda de algo de sacrificio a sus seguidores no sólo es fiel a la naturaleza de la religión, sino que es mucho más probable que engendre el tipo de devoción que perdure a través de la época oscura terapéutica.
Aparte de sus innovaciones teológicas radicales que son imposibles de armonizar con el cristianismo, como fue conocido en sus primeros 1900 años, el cristianismo progresista ha adoptado plenamente la mentalidad terapéutica, en el sentido de que significa Rieff.
Se está muriendo porque no puede convencer a los jóvenes a abrazar sus valores dentro de las iglesias institucionales.
No se puede negar que muchos de los jóvenes aceptan el liberalismo social adoptado por los sacerdotes progresistas, pero tampoco se puede negar que la mayor parte de ellos no ve por qué tienen que ser parte de una iglesia para ser socialmente progresistas.
Fuentes:
thwordinc.blogspot.com/…/the-suburban-pa…
www.es.catholic.net/…/herejas-sobre-j…
www.goodreads.com/quotes/616058-a-god-wi…
www.theamericanconservative.com/…/last-episcopali…
es.wikipedia.org/wiki/Consecuencialismo
Publicado por Unción Católica y Profética en uncioncatolica.blogspot.com
La Iglesia es importante para los verdaderos discípulos del Señor Jesús, por ser una institución requerida, instituida y organizada por la voluntad de Dios.
Al cuestionamiento de algunos sectarios diciendo que solo Cristo es necesario y la Iglesia no, porque se tiene la opción de una relación personal con Dios; les responde el Señor edificando una sola Iglesia "… y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia …" (Mateo 16,18), dando poder a la única Iglesia, que es importante porque es el Cuerpo Místico del verdadero salvador, "… Cristo es Cabeza de la Iglesia, el salvador del Cuerpo" (Efesios 5,23). La Iglesia si es de radical importancia porque "Así los puso Dios en la Iglesia, primeramente como apóstoles; en segundo lugar como profetas; en tercer lugar como maestros; luego, los milagros; luego, el don de las curaciones, de asistencia, de gobierno, diversidad de lenguas" (I Corintios 12,28).
Aunque dolorosamente la Iglesia es despreciada por algunas personas, es la amada del Jesucristo bíblico, "… Cristo amó a la Iglesia y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, purificándola mediante el baño del agua, en virtud de la palabra, y presentársela resplandeciente a sí mismo; sin que tenga mancha ni arruga ni cosa parecida, sino que sea santa e inmaculada" (Efesios 5,25-27), quién le da el poder y la comisión de evangelizar, distribuir las gracias; de ser maestra y pastora de toda la creación: «Tened cuidado de vosotros y de toda la grey, en medio de la cual os ha puesto el Espíritu Santo como vigilantes para pastorear la Iglesia de Dios, que él se adquirió con la sangre de su propio hijo" (Hechos 20,28), y a la cual le garantizó la victoria "…edificaré mi Iglesia, y las puertas del Infierno no prevalecerán contra ella …" (Mateo 16,18). Todos los creyentes en Cristo debemos creer y obedecer a la Iglesia, porque Jesús dijo: "En verdad, en verdad os digo: el que escucha mi Palabra y cree en el que me ha enviado, tiene vida eterna y no incurre en juicio, sino que ha pasado de la muerte a la vida" (Juan 5,24) Y luego añade a los miembros de su Iglesia: «Quien a vosotros os escucha, a mí me escucha; y quien a vosotros os rechaza, a mí me rechaza; y quien me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado» ( Lucas 10,16) por tanto quienes rechazan a la Iglesia rechazan a quién la edificó, y adquirió con su Divina Sangre, a quién diariamente nos advierte: «No todo el que me diga: "Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial. (Mateo 7,21)
Y PARA EVITAR QUE LO QUE HACEMOS NO TENGA CONSECUENCIAS EN EL JUICIO FINAL, TRATAMOS DE CAMBIAR EN LA TIERRA LOS CRITERIOS POR LO QUE SE NOS JUZGARÁ EN EL CIELO, TRATANDO DE MODIFICAR LOS QUE LA IGLESIA CONSIDERA PECAMINOSO O ADMISIBLE.
¿Pero esta fantasía mundana de que Dios acepta casi cualquier laxitud es fecunda a largo plazo para la institución eclesial?
¿LA MAYORÍA DE LOS CATÓLICOS CREEN EN EL DIOS CRISTIANO?
Está siendo cada vez más dudoso.
¿Creen en el Dios que se hizo hombre para salvarnos del pecado y que murió en la cruz y resucitó, que nos llama a participar en una vida de sacrificio y amor hasta que él venga para elevarnos de entre los muertos en el Juicio Final, donde encontraremos que algunos han elegido la vida eterna, otros la condenación eterna?
En los hechos, la mayoría perece creen en lo que cita H. Richard Niebuhr que …
“Un Dios sin ira llevó a los hombres sin pecado a un reino sin juicio a través de un Cristo sin cruz.”
Esta es la religión del anticristo, de Cristo sin la cruz, a pesar que adopte todos los aspectos formales y ritos del catolicismo original.
UNA HEREJÍA O NUEVA RELIGIÓN SE ABRE PASO
Hoy día pulula dentro del catolicismo una herejía muy grave.Por querer acercar tanto a Cristo a los hombres y por pedir que solucione nuestros problemas económicos y materiales, se ha despojado a Cristo de su dimensión divina y espiritual.
Para esta herejía, Jesús no vino para salvarnos del pecado, no murió en la cruz para redimirnos y abrirnos las puertas del cielo.
Para algunos, sobre todo en Latinoamérica, vino como inconformista que quiere poner orden y justicia, destruyendo a los ricos y capitalistas, para así dar de comer a los pobres.
Quienes defienden esta posición dicen “Lo urgente hoy es el estómago, la cultura, la distribución igualitaria”.
Este error distorsiona la misión de Cristo, pues Cristo vino a liberarnos del pecado que se esconde en el corazón de cada hombre. Eliminado el pecado, podrán cambiarse más fácilmente las estructuras de pecado.
COMO PODEMOS DEFINIR ESTA NUEVA RELIGIÓN
¿Donde está la base falsa de esta herejía? En que la salvación universal se ofrece a todo el mundo, independientemente de sus creencias o prácticas éticas.
Queremos evitar el dolor y ser felices, y esta interpretación de la religión nos afirma justo donde estamos y lo que queremos. Y nos ofrece el mecanismo de orar para que esto sea posible.
Belloc llamó Modernismo a esta herejía, pero incluso él reconoció que parecía ser una mezcla de todas las herejías y que era difícil de precisar o definir.
Otros creen que el mejor nombre para ella es Inconsecuencialismo, o sea la creencia de que no existen las consecuencias en ninguna de nuestras elecciones o acciones. Nada de lo que hacemos conducirá al cielo o al infierno.
Nuestras vidas son obras de ficción escritas enteramente por nosotros mismos.
Dios aplaude cualquier elección que hacemos, porque nos ama y quiere que seamos felices, como un maestro de jardín de infantes de escuela pública indulgente.
Y puesto que nada conduce a nada, la cultura de esta herejía es una especie de parodia del Reino de los Cielos: el infierno en la tierra, un lugar que es por encima de todo irreal.
TENEMOS LIBERTAD PARA ELEGIR TODO
Es un lugar donde podemos elegir nuestros propios géneros, nuestras propias doctrinas, nuestro propio camino, nuestra verdad, nuestra propia vida.
Y si por ahí no lo hacemos porque aún nos pesa la catequesis que recibimos cuando niños, no vemos mal, ni reprobable, ni siquiera cuestionable, que otros lo hagan.
Es un lugar que carece de todo juicio, porque el juicio es sobre las consecuencia de nuestra propia toma de decisiones del día a día, de nuestras propioas “decisiones difíciles”; pero sucede que ahora ningun asunto tiene consecuencias en lo más mínimo.
Así el infierno es un lugar donde nada se conecta con nada, todo está aislado, fragmentado y atomizado.
EL CRISTO SIN LA CRUZ
El objetivo es negar la cruz y todo lo que implica la Cruz: el sacrificio, el sufrimiento, la disciplina, la decisión, la muerte, la culpa y el pecado.
Tener a Cristo sin la cruz es su objetivo. Esto, según el Obispo Sheen, fue el sello del espíritu del anticristo: la negación de la cruz en todas sus formas.
Pero si usted, en toda la filosofía de su vida se dedicó a negar las consecuencias (y la cruz es la expresión más contundente de las consecuencias), entonces todo lo que usted haga – especialmente su religión – se convierte en inconsecuente, lo que significa decir, sin importancia, menor, sin sentido, sosa, y en última instancia una forma de pasar el tiempo y conformarnos.
¿POR QUÉ UN SER HUMANO NORMAL BUSCA ALGO COMO ESTO?
La mayoría de nosotros no estamos encantados con los cristianos que nos hablan del pecado, del infierno, de los 10 mandamientos. Y ahí está el caldo de cultivo.
Si queremos una experiencia religiosa podemos tomar un paseo por el bosque y orar en paz y tranquilidad.
Pero por supuesto, necesitamos a la Iglesia para los Sacramentos y para la enseñanza infalible de la moral y la fe, pero esto es visto como un atavismo, una costumbre formal que ha sido despojada de consecuencias.
EL CRISTO SIN IGLESIA ¿Y UNA IGLESIA SIN JERARQUÍA?
El objetivo es negar la Iglesia, la esposa de Jesucristo y contestar a su santo magisterio todo lo que implica llevar a las almas a la desobediencia, al relativismo y al desconocimiento, para que el pueblo de Dios ande como Ovejas sin Pastor.
Es el espíritu de apostata pretende tener a un Cristo sin la Iglesia Católica. Es el espíritu de Jezabel atacará siempre a todos los profetas, especialmente al Sucesor de Pedro, para promover la desobediencia a su magisterio.
La apostasía es un horrible pecado, de una persona que habiendo sido creyente en Cristo y bautizado en su única Iglesia, después de abrazar la fe en el Señor, se eche atrás y reniegue de la fe en Cristo y su santa Iglesia, sobre lo que el Señor nos alerta: "Dijo Jesús: «Nadie que pone la mano en el arado y mira hacia atrás es apto para el Reino de Dios.» (Lucas 9,62). Por eso debemos perseverar en nuestra fe católica en Cristo encarnado, crucificado y resucitado, librarnos de todo engaño, revisando todo lo que la Santa Biblia dice respecto a cada tema, para no equivocar o torcer, el sentido del Libro Sagrado, no vasta con proclamar que Cristo sea nuestro único y suficiente salvador; el Reino de los cielos es para los que hagamos con perseverancia la voluntad de Dios; “El cual, dará a cada cual según sus obras: a los que, por la perseverancia en el bien busquen gloria, honor e inmortalidad: vida eterna” (Romanos 2,7) pues las referencias Bíblicas, hay que entenderlas según su contexto, atentos y cuidadosos como lo manda la Biblia: "¡Mirad, hermanos!, que no haya en ninguno de vosotros un corazón maleado por la incredulidad que le haga apostatar de Dios vivo" (Hebreos 3,12). «No todo el que me diga: "Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial" (Mateo 7,21). “Con vuestra perseverancia salvaréis vuestras almas”. (Lucas 21,19)
Es así como en algunas homilias dicen que cuando Cristo venga, “todo nuestro deseo será cumplido”, cuando en realidadnuestra lucha en el mundo tiene que ver con negar el propósito del deseo, educarnos en la abstención y eliminar las pasiones desordenadas.
Porque en realidad el deseo es una especie de manifestación física del sentimiento de inconsecuancialismo.
Amar a una mujer, casarse con ella, formar una familia que dure toda la vida, y tener un montón de bebés no es el punto del deseo humano normal para un inconsecuencialista.
La esterilidad es el único sacramento de la fe inconsecuente y disfrutar de las libertades sin castigo en ningún momento.
¿Y que es el cielo? Es un gran buffet de postres donde se puede comer todo lo que quieras y no engordar, no sufrir las consecuencias.
Es un lugar donde nadie juzga a nadie más, donde no hay Juicio en la naturaleza sobre la realidad, donde todos somos felices para siempre, donde nuestros deseos se cumplen fácilmente, cualquiera que sean.
EL COLAPSO INMINENTE
¿Quién querría un cielo así, o una fe así? Vara Dreher escribe sobre el colapso inminente de lo que he llamado la Iglesia de Inconsecuencialismo.
El sociólogo Philip Rieff, en El Triunfo de la Terapéutica, observó que las instituciones mueren cuando ya no pueden comunicar sus valores fundamentales a la siguiente generación de una manera convincente.
Dijo esto para apoyar su afirmación (¡de 1966!) que el cristianismo se estaba muriendo en Occidente, porque nosotros, los occidentales nos hemos vuelto hostiles al espíritu ascético que es inseparable de cristianismo auténtico y que ha sido desde el principio.
Y probablemente Rieff tenga razón, porque un cristianismo que hace la demanda de algo de sacrificio a sus seguidores no sólo es fiel a la naturaleza de la religión, sino que es mucho más probable que engendre el tipo de devoción que perdure a través de la época oscura terapéutica.
Aparte de sus innovaciones teológicas radicales que son imposibles de armonizar con el cristianismo, como fue conocido en sus primeros 1900 años, el cristianismo progresista ha adoptado plenamente la mentalidad terapéutica, en el sentido de que significa Rieff.
Se está muriendo porque no puede convencer a los jóvenes a abrazar sus valores dentro de las iglesias institucionales.
No se puede negar que muchos de los jóvenes aceptan el liberalismo social adoptado por los sacerdotes progresistas, pero tampoco se puede negar que la mayor parte de ellos no ve por qué tienen que ser parte de una iglesia para ser socialmente progresistas.
Fuentes:
thwordinc.blogspot.com/…/the-suburban-pa…
www.es.catholic.net/…/herejas-sobre-j…
www.goodreads.com/quotes/616058-a-god-wi…
www.theamericanconservative.com/…/last-episcopali…
es.wikipedia.org/wiki/Consecuencialismo
Publicado por Unción Católica y Profética en uncioncatolica.blogspot.com
La Iglesia es importante para los verdaderos discípulos del Señor Jesús, por ser una institución requerida, instituida y organizada por la voluntad de Dios.
Al cuestionamiento de algunos sectarios diciendo que solo Cristo es necesario y la Iglesia no, porque se tiene la opción de una relación personal con Dios; les responde el Señor edificando una sola Iglesia "… y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia …" (Mateo 16,18), dando poder a la única Iglesia, que es importante porque es el Cuerpo Místico del verdadero salvador, "… Cristo es Cabeza de la Iglesia, el salvador del Cuerpo" (Efesios 5,23). La Iglesia si es de radical importancia porque "Así los puso Dios en la Iglesia, primeramente como apóstoles; en segundo lugar como profetas; en tercer lugar como maestros; luego, los milagros; luego, el don de las curaciones, de asistencia, de gobierno, diversidad de lenguas" (I Corintios 12,28).
Aunque dolorosamente la Iglesia es despreciada por algunas personas, es la amada del Jesucristo bíblico, "… Cristo amó a la Iglesia y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, purificándola mediante el baño del agua, en virtud de la palabra, y presentársela resplandeciente a sí mismo; sin que tenga mancha ni arruga ni cosa parecida, sino que sea santa e inmaculada" (Efesios 5,25-27), quién le da el poder y la comisión de evangelizar, distribuir las gracias; de ser maestra y pastora de toda la creación: «Tened cuidado de vosotros y de toda la grey, en medio de la cual os ha puesto el Espíritu Santo como vigilantes para pastorear la Iglesia de Dios, que él se adquirió con la sangre de su propio hijo" (Hechos 20,28), y a la cual le garantizó la victoria "…edificaré mi Iglesia, y las puertas del Infierno no prevalecerán contra ella …" (Mateo 16,18). Todos los creyentes en Cristo debemos creer y obedecer a la Iglesia, porque Jesús dijo: "En verdad, en verdad os digo: el que escucha mi Palabra y cree en el que me ha enviado, tiene vida eterna y no incurre en juicio, sino que ha pasado de la muerte a la vida" (Juan 5,24) Y luego añade a los miembros de su Iglesia: «Quien a vosotros os escucha, a mí me escucha; y quien a vosotros os rechaza, a mí me rechaza; y quien me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado» ( Lucas 10,16) por tanto quienes rechazan a la Iglesia rechazan a quién la edificó, y adquirió con su Divina Sangre, a quién diariamente nos advierte: «No todo el que me diga: "Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial. (Mateo 7,21)